Ingredientes para 4 personas (yo hice la mitad):
- 2 dientes de ajo
- 1 cebolla grande
- 1 kg de calabacines
- 6 huevos
- 150 gr de jamón cocido o serrano (yo utilicé jamón serrano en taquitos)
- 50 gr de queso manchego, por ejemplo, García Vaquero, rallado (yo he probado tanto con manchego como con queso azúl y con los dos queda bien)
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal
- Pimienta
- 1 cucharadita de perejil picado
- Precalentar el horno (con aire) a 175º
- Lavamos los calabacines, los pelamos y los cortamos en cuadraditos.
- Limpiamos los dientes de ajo y los picamosa finitos.
- Limpiamos la cebolla y la cortamos en trozos pequeños.
- Batimos los huevos como para tortilla y los salpimentamos. Reservamos.
- En una sartén freímos los ajos. Enseguida echamos la cebolla. Cuando empiece a tomar color, añadimos los calabacines. Lo mantenemos al fuego unos 15 minutos. Otra manera más rápida de hacerse (aunque no sabría tan rico) sería poner la mezcla en un bol y meterla al microondas (al 100% de potencia) durante unos 10 minutos.
- Pasar la mezcla a través de un colador para escurrir el aceite sobrante.
- Volver a poner al fuego la sartén con la mezcla y, cuando el calabacín esté blando, añadir el jamón troceado y a continuación, el queso rallado y el perejil.
- Apartamos del fuego y vertemos esta mezcla, poco a poco, en el bol donde están los huevos batidos. Mezclamos bien.
- Untamos un molde rectangular con aceite (además, podemos forrar el fondo con papel de horno para evitar que el pastel se pegue) y vertemos el preparado.
- Meter el preparado al horno durante 30 minutos (si son moldes pequeños) o 50 (si el molde es grande). NOTA: el tiempo dependerá de cada horno (habrá que dar pequeños golpes al molde y si el pastel se mueve es que todavía no estará hecho)
- Se puede adornar con mayonesa y tomate
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